Debido a la movilidad del terreno, a la manera como levantaron el muro del frente del templo con unas vigas que no estaban pegadas a las columnas de la estructura, y al peso de los calados que en el mes de agosto se colocaron para evitar que los ladrones siguieran haciendo daños, se vio la necesidad de reparar todo el muro ya que comenzó a agrietarse y a ceder, las puertas también comenzaron a descolgarse. Además en las excavaciones que están haciendo se encontró una filtración de agua de la cual aun se desconoce su causa.
Lastimosamente esta situación hace que los proyectos que se tenían para este año, como el salón parroquial se vean paralizados, ya que el fondo con el que se cuenta debe utilizar para esta reparación. Sin embargo será necesario realizar otras actividades para ayudar a la terminación de esta obra.
Con la confianza en Dios y en su providencia que no abandona a nadie y la colaboración de los fieles de la parroquia y de personas generosas llevaremos adelante esta reparación
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